domingo, 10 de febrero de 2008

UN MILLÓN DE ASISTENTES EN LA CELEBRACIÓN DE LA FAMILIA EN MADRID


En la madrileña plaza de Colón se dieron cita más de un millón de asistentes provenientes de toda España, convocados por el Cardenal arzobispo de Madrid Mons. Rouco para una magna celebración sobre la familia cristiana, en concurrencia con la celebración litúrgica del día de la Sagrada Familia.
En torno a un escenario instalado en la plaza de Colón se congregó la inmensa multitud de personas y familias, de manera que sobre la misma se perdía la vista en las tres direcciones geográficas de la plaza (Recoletos, Castellana y Génova). Desde bien temprana mañana se fueron incorporando grupos venidos de toda España, e incluso del extranjero, que accedían a la plaza y aledaños de la misma, según se iba llenando, contando con un importante dispositivo de seguridad, asistencia sanitaria, y voluntariado de la organización del evento.
Desde la Región de Murcia se contabilizaron más de 10.000 asistentes que fueron llegando a Madrid, en los albores del día, en multitud de autobuses.
Sólo de la Parroquia de San Bartolomé de Murcia fletó 18 autobuses que partieron de Murcia a las 3 de la madrugada del domingo 30, y tras una larga expedición nocturna, fueron llegando a Madrid en torno a las 9 de la mañana, accediendo a las inmediaciones del madrileño Parque del Retiro, donde las autoridades de la Capital de España habían dispuesto organizadamente el estacionamiento de un numerosísimo grupo de autobuses que se iban incorporando.
A la llegada a Madrid, la riada humana de familias, con sus miembros más jóvenes y mayores, se hacían notar desde la zona de Atocha y el Retiro, a su acceso por la calle de Alcalá, plaza de Cibeles, y Paseo de Recoletos hasta llegar a la plaza de Colón, si bien en todo con un aire festivo y ordenado. Aún cuando la temperatura a esa hora de la mañana en Madrid (3 grados) invitaba poco al paseo, si bien con el curso del día el sol facilitó la normalización de la temperatura, pese a mantenerse un día frío del invierno madrileño, que se trocaba paradójicamente en calido por el ambiente alegre y festivo que se vislumbraba entre los participantes.
El acto oficialmente dio comienzo a las 11 horas, aunque desde las 10 de la mañana ya se comenzaba a crear ambiente entre los presentes por parte de un par de locutores que mantuvieron la atención y entretuvieron al público asistente que se iba incorporando al evento. Abrió el acto Mons. Blázquez, presidente de la Conferencia Episcopal, que presentó básicamente los valores de la familia cristiana, sus bondades –fruto de su larga evolución histórica, y de la previsión divina sobre ella-. Seguidamente intervinieron los cardenales Mons. García Gasco, arzobispo de Valencia, y Mons. Cañizares, arzobispo de Toledo, los cuales hicieron una profunda defensa de la familia cristiana, al tiempo que hicieron las advertencias más severas del acto en relación con el laicismo y ateismo, del que indicaron los perniciosos resultados del mismo. Haciendo referencia, el primero, al incumplimiento que en materia de familia se está haciendo de la Constitución de 1978, concluyendo que ello determinaba un grave perjuicio a nuestra democracia. Por su parte, Mons. Cañizares alentó a los presentes a defender la familia cristiana, frente a todo ataque, arriconamiento o rebaja política-social, animando a los presentes a defender públicamente a la familia y sus derechos.
Seguidamente participaron miembros de diversos movimientos eclesiales de laicos (movimiento focolar, acción católica, comunión y liberación, camino neocatecumenal, etc.) que intervinieron en apoyo de los valores cristianos de la familia con diverso tipo de argumentos, religiosos, sociales, personales, etc. También tomaron la palabra algunas personas que dieron sus testimonios de vida en familia, bien por larga experiencia, o por especiales dificultades vividas y superadas en el seno de la familia.
El corolario central al acto lo puso la intervención del Papa Benedicto XVI desde Roma, a través de una conexión televisiva en directo, que lo presentó a los asistentes en Colón a través de las gigantescas pantallas instaladas al efecto. El Papa saludó y felicitó a los participantes en el acto, enfatizando sobre los valores cristianos de la familia, y especialmente referidos a la concepción de matrimonio (“unión entre un hombre y una mujer para toda la vida, y abierta a la vida”).
Finalmente cerró el acto el cardenal arzobispo de Madrid, Mons. Rouco Varela, convocante del acto que en sus palabras insistió en los extremos señalados por los anteriores intervinientes, apuntando el importantísimo valor de la familia para el cristiano, y para la sociedad en general, insistiendo en los derechos de la familia postulando la defensa de los mismos. Concluyendo el acto con una procesión de la imagen de la Virgen de la Almudena, patrona de Madrid, a la que se le encomendó la intercesión y defensa de la familia, precisamente en el día de la Sagrada Familia.

No hay comentarios: